Jueves 9 de julio, Día de la Independencia sin locro en familia ni pastelitos ni vino. Minutos antes del mediodía el acto central consistió en un evento “semi-presencial” en el cual en el salón de actos de la Residencia de Olivos se encontraban en primer plano diez personas, el presidente y nueve más. De fondo, en una pantalla, los veintitrés gobernadores y el jefe de gobierno porteño.

Izamiento de la bandera, video institucional, el gobernador de Tucumán desde la casita, niños de todas las provincias, respeto y puesta en valor de los idiomas de los pueblos originarios, hasta aquí un acto normal en un contexto anormal.

Volvamos a los nueve participantes, por supuesto por el sector que me atañe, el primero que llamó mi atención fue Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), para muchos dirigentes agropecuarios de la coalición gobernante es de los líderes más coherentes que ha tenido la entidad en sus 153 años de historia.

Sin embargo, voy a aprovechar la situación para analizar la representatividad de las entidades gremiales del agro, ya les anticipo que la SRA dista de ser la que nuclea a la mayor cantidad de productores:

Circunscribiendo las entidades a aquellas que conforman la “Mesa de Enlace”, que se trata de aquel canal de diálogo que surgió a partir de la resolución 125/08 que subsiste actualmente, sí, subsiste, ya que presenta fracturas por la forma de afrontar las distintas problemáticas que afectan al sector, tanto que alguno de sus integrantes criticaron la presencia de Pelegrina en el acto del 9 de Julio. Las entidades son cuatro:

1. Sociedad Rural Argentina: fundada en 1866, a grandes rasgos tiene unos diez mil socios, sin embargo, en las últimas elecciones en 2018 votaron 1217 socios sobre un padrón de 1500. Su fuerte habita en el registro genealógico ganadero, la tradicional feria en su predio en Palermo y lobby sobre los actores de poder en la Ciudad de Buenos Aires.
2. Confederaciones Rurales Argentinas: fundada en 1943, cuenta con 14 confederaciones y federaciones, integradas a su vez por más de 300 sociedades rurales de todo el país. Representa poco más de 109.000 productores.
3. Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada: el acta constitutiva data de 1956 pero nuclea federaciones del interior del país de larga historia, actualmente reúne a diez federaciones que, a su vez reúnen a 120.000 empresas cooperativas agrarias.
4. Federación Agraria Argentina: fundada en 1912 al calor del grito de Alcorta surgió como oposición a la hegemonía de la Sociedad Rural Argentina para con las tierras anexadas en la conquista del Desierto. Históricamente sus bases estuvieron conformadas por pequeños y medianos productores y arrendatarios. Cuenta con una fuerte presencia en el sur y parte del centro de Santa Fé. Su principal federación es Agricultores Federados Asociados (AFA), solo esta cuenta con 36.000 productores asociados.

Como vemos y les anticipe, la SRA lejos está de ser la más representativa, sin embargo, tiene un lugar en la mesa del “grupo de los seis”, una construcción del círculo rojo, avalada por todos los gobiernos, que supone agrupar a los representantes de los principales sectores económicos del país:

1. Unión Industrial Argentina
2. Bolsa de Comercio
3. Cámara Argentina de la Construcción
4. Asociación de Bancos Argentinos
5. Cámara Argentina de Comercio y Servicios
6. Sociedad Rural Argentina

Por enésima vez esta convocatoria supone ser la antesala del tan buscado “Consejo Económico y Social” que busca un “pacto económico y social”, valga la redundancia, que conduzca a un crecimiento y desarrollo consensuado entre los distintos sectores y actores de la economía, a la derecha del presidente se encontraba Pelegrina, a la izquierda, un cupo femenino reducido en cabeza de Carolina Castro de UIA, en una punta, Héctor Daer intentando balancear para el lado de los trabajadores.

Desde algunos medios buscaban justificar la escena como “rodear al presidente de poder”, hoy por hoy el poder no se encuentra en otro lugar que en los cientos de miles argentinos que están perdiendo sus empresas y sus trabajos por una crisis económica conjugada por la pandemia de los cuatro años macristas con la de los tres meses y medio de coronavirus.

¿Cuánto más faltará para que conozcamos como vamos a salir de este pozo?

Por el lado del agro, aun siendo uno de los sectores menos afectados por la crisis económica, se empiezan a ver algunas luces al final del túnel para su transformación productiva hacia algunos ejes que mencionábamos en la edición pasada.

Desde la oficina del Presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa se está trabajando en un proyecto con no solo las cuatro entidades que mencionamos anteriormente sino también con las cámaras que agrupan a prácticamente todas las actividades agropecuarias de nuestro país.

En definitiva, pasamos un 9 de julio en nuestras casas viendo gestos que confunden, algunos que nunca lo hicieron irresponsablemente en esta situación salieron a la calle, nos quedamos esperando una vez más los lineamientos para entender por donde pasará la reconstrucción y la vuelta a un muy pospuesto y accidentado sendero de crecimiento y desarrollo.

Fuente: Identidad Colectiva