La comunidad organizada y las proclamas individualistas
J. D. Perón

"Nadie se realiza en una comunidad que no se realiza". Considero clave esta idea central del pensamiento peronista: la comunidad organizada es aquella organización social basada en el humanismo y la cooperación; la llamada "tercera posición" entre el liberalismo individualista y el colectivismo que plantea el marxismo (o más específicamente la experiencia que en ese tiempo se llevaba adelante en la ex URSS). Esto viene a colación de un breve posteo personal que trajo muchas controversias, en tanto escribí "los hombres del conurbano están preocupados por llevar un plato de comida a la mesa, y no en deconstruir sus masculinidades". Ello porque realmente me resulta indignante ver cómo funcionarios y funcionarias del actual gobierno, que se presentan como peronistas, parecen estar preocupados por agendas orientadas a pequeñas minorías y no al bienestar general. El anuncio presidencial sobre "el fin del patriarcado" en un contexto dónde prácticamente la mitad de los argentinos somos pobres me parece que roza con la insolencia. Podríamos resumir entonces que la situación del país es así: "un país libre de dominación machista pero en el cual el precio de un churrasco es prohibitivo". Ciertamente, el fin de semana una colega de la comunicación expuso algo muy cierto: las mujeres tenemos de aquí en más la libertad de abortar, no así la de elegir ser madres. Si no accedemos al trabajo digno, si alquilar una casa nos lleva un salario mínimo o más, si no tenemos para comprar pañales o leche maternizada... cualquiera que me lee y tiene hijos sabe bien de lo que hablo. Una familia tipo (dos adultos y dos niños) necesita $120.000 por mes para vivir decentemente y si somos realistas y miramos alrededor vemos cuántos compatriotas han sido expulsados del empleo formal, han perdido sus pocos ahorros durante la pandemia, viven de changas y de lo que sale en el día. Un jubilado que cobra una jubilación mínima hoy no puede darse el lujo de comer carne, y de hecho el consumo de carne vacuna del 2020 fue el más bajo que hace 100 años. Aumentan los peajes, aumenta el combustible y todo repercute en los ingresos, cada vez más magros de los argentinos. A simple vista podemos darnos cuenta que nuestra comunidad no logra realizarse, y es lógico pensar que un hombre que está sin trabajo o bien el que trabaja 12 horas para llegar a un salario de subsistencia seguramente no esté pensando en inscribirse a un curso por Instagram para "deconstruirse" ni se este replanteando en como se forma su masculinidad. Sencillamente porque este hombre no se sienta beneficiado por ningún privilegio, porque aquí en este estado de cosas, los únicos privilegiados son los que tienen buenos ingresos asegurados, los altos funcionarios del Estado, los grandes empresarios y los jugadores de la especulación financiera. Entonces todo lo que no es fuentes de trabajo, mejora en los ingresos, mejor calidad de vida; termina siendo declarativo, tribunero, una manta de humo que viene a tapar los padecimientos del pueblo. El peronismo nunca interpelo a las minorías, por el contrario, constituyó como sujeto político al pueblo trabajador y puso a la comunidad organizada como eje central del movimiento. Esto no quiere decir que no haya que ocuparse de las minorías o que estas no tengan acceso a la amplitud de derechos, todo lo contrario. El tema es que esos derechos no pueden realizarse cuando hay hambre, postergación, desigualdad, falta de vivienda, de comida, de lo más esencial. Para una mujer que no le alcanza ni para comprar medio kilo de yerba, "el fin del patriarcado" no le resuelve prácticamente nada, porque hasta lo que se nadie se alimenta con palabras ni con simbologías.

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