Durante 2016 y 2017 el Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Carolina Stanley, suspendió “por si las dudas”, 170.000 asignaciones hasta revisar la aplicación y los beneficiarios, cuya práctica fue frenada por la Justicia, la cual exigió la reinstauración de los beneficios, de ese total se restituyeron, apenas 43.150, incumpliendo la orden judicial. Mientras tanto, unas 127 mil personas permanecen sin cobrar, a la vez que se mantienen cajoneados otros 51 mil pedidos que debería haber otorgado.

Para agregar más dramatismo a la cuestión  desde el Ministerio, se adelantó que se pondrá en revisión todo el sistema e incluso a asignaciones estímulos entregadas de manera vitalicia. Por lo tanto, el número de beneficiarios se se seguirá reduciendo, y todo para cumplir con el plan de déficit cero, comprometido con el pago de deuda con el Fondo Monetario.

En otro orden de cosas, y según la resolución 7/2019 del Ministerio de Educación,  los valores de las becas Progresar son los mismos que se registran desde febrero de 2018 (no olvidar le dato que durante el año pasado tuvimos una inflación de 47,6%). Las Becas Progesar, son concretamente el estímulo para finalizar los estudios se mantiene con un mínimo de 1250 pesos y un tope de 4900 para quienes cursen carreras catalogadas como “estratégicas”, respecto a este tema, docentes y estudiantes realizaron una clase pública frente al Ministerio de Educación para reclamar más presupuesto para las becas Progresar.

La obsecuencia con el Fondo Monetario, el desprecio por la soberanía nacional, y la perversión de desproteger a los más débiles, es la especialidad del gobierno macrista.