Con los mismos argumentos con que en su momento, defendió al policía Luis Chocobar, que mató por la espalda a un joven que había cometido un asalto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, protegió al policía de la Ciudad Esteban Armando Ramírez, que mató a Jorge Gómez, tras pegarle una patada en el estómago. La ministra, dijo que el policía “no buscó” ese final y hasta lo defendió por “no usar su arma” de fuego. En el régimen de terror, propuesto por Macri, Bullrich & cía, en dónde los policías son entrenados para anular, golpear y no para ayudar, siempre se responsabiliza a la víctima.